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Plantas

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Cada planta verde es una sorprendente fábrica que hace lo que ninguna fábrica del hombre o laboratorio científico ha podido...

LAS PLANTAS

Cada planta verde es una sorprendente fábrica que hace lo que ninguna fábrica del hombre o laboratorio científico ha podido hacer. Extrae carbono del gas anhídrido carbónico de la atmósfera; hidrógeno y oxígeno del agua que extrae del suelo; y luego combina estos elementos en una gran variedad de productos complejos. La energía que necesita para hacer esto la consigue de la luz del Sol.

Las plantas, la base de la vida

Sin entrenamiento universitario de química y, de hecho, sin la habilidad para pensar y razonar, una planta combina átomos de carbono, hidrógeno y oxígeno para hacer alimentos complicados como almidón, proteína, aceite, grasa y azúcar. A través de poros pequeños llamados estomas, una planta adquiere aire de la atmósfera. Del anhídrido carbónico que hay en el aire extrae carbono. De hecho, se calcula que las plantas remueven 100.000.000.000 de toneladas de carbono de la atmósfera cada año. Pero el oxígeno, necesario para hombres y animales, se descarga de las hojas como residuo que resulta de dividir el agua en hidrógeno y oxígeno.

Sin la vida vegetal no podría existir la vida que conocemos sobre la Tierra, porque, ya sea directa o indirectamente, todas las criaturas vivas dependen de las plantas para la vida.

Sólo ellas pueden sintetizar alimento del aire, agua y elementos del suelo.

Las partes constituyen una planta son la raíz, el tallo y las hojas.

La semilla

Cuando se dice que la semilla germina se está hablando del crecimiento del embrión. Al crecer, el embrión se transforma en una plántula que emerge de la semilla y se asoma al espacio exterior.

Permanece en su condición de plántula hasta que adquiere la posibilidad de nutrirse por sí misma, en forma independiente de la semilla y de las sustancias alimenticias que ella puede almacenar.

Partes de una planta

 

La raíz

Es el órgano de las plantas superiores, casi siempre subterráneo, que desempeña varias funciones, entre ellas absorber y conducir agua y minerales disueltos, acumular nutrientes y sujetar la planta al suelo.

La raíz se diferencia del tallo por su estructura, por el modo en que se forma y por la falta de apéndices, como yemas y hojas. La primera raíz de la planta, llamada radícula, se alarga cuando germina la semilla y forma la raíz primaria. Las raíces que se ramifican a partir de la primaria se llaman secundarias.

En muchas plantas, la raíz primaria se llama pivotante, es mucho mayor que las secundarias y alcanza mayor profundidad en el suelo. La remolacha o betabel y la zanahoria son ejemplos característicos de plantas con gruesas raíces pivotantes. Algunas especies con raíces de este tipo son difíciles de trasplantar, porque la rotura de la raíz primaria determina la pérdida de casi todo el sistema radicular y la muerte de la planta.

Según el lugar donde se encuentre, la raíz puede ser: subterránea, viven en el suelo y tienen abundante pelo radicular (el sauce); acuáticas, se desarrollan en el agua y en lugares pantanosos y presentan diferentes modos de vida (irupé), y aéreas, son las que viven en contacto con el aire, es el caso de las raíces de las plantas epifitas que crecen y se fijan a otros vegetales pero se nutren de los materiales que toman de la atmósfera y no de las plantas sobre las que viven (clavel del aire).

Función de las raíces

La raíz goza de ciertas propiedades: el geotropismo positivo, donde la raíz crece hacia el centro dirigida por la fuerza de la gravedad, y el hidrotropismo positivo, donde la raíz se dirige hacia las zonas húmedas en busca de agua y sales minerales, asegurando así la función de absorción. Por estas 2 propiedades la raíces pueden penetrar en el suelo, orientarse, fijar al vegetal y permitir la absorción del agua y de sales minerales. El hidrotropismo “vence” al geotropismo cuando la raíz dirigida hacia el centro de la tierra no encuentra el agua.

El tallo

Es el órgano de la planta que crece en forma contraria a la raíz. Es la porción de las plantas vasculares que acostumbra a llevar las hojas y yemas. Los puntos del tallo de los que brotan las hojas y las yemas se llaman nudos, y el espacio comprendido entre dos nudos, entrenudos. Las yemas

Durazno, fruto del duraznero. permiten el crecimiento del tallo y de las ramas y además producen otras ramas, hojas y flores.

Funciones del tallo

El tallo sostiene las otras partes aéreas y puede hacerlo por poseer geotropismo negativo (hace que se aleje del suelo) y fototropismo positivo (hace que las ramas y las hojas se orienten hacia los lugares de mayor luminosidad favoreciendo la fotosíntesis); conduce la savia y a veces almacena sustancias de reserva.

Clasificación del tallo

Los tallos pueden ser aéreos y subterráneos. Los aéreos se desarrollan sobre el suelo, en contacto con las atmósfera. Se clasifican en herbáceos (tallos blandos de la planta, por ejemplo la amapola); troncos (tallos leñosos ramificados, por ejemplo los árboles); caña (con nudos muy marcados, por ejemplo el maíz) y estípites (tallos cilíndricos sin nudos y sin ramificaciones lateral, con un “penacho” de hojas en su extremo superior, por ejemplo la palmera). Por su posición pueden ser erguidos, como los árboles; rastreros, como la violeta; y trepadores, como la vid, la hiedra y la arveja. Los tallos subterráneos son los que viven y se desarrollan debajo del suelo. Se clasifican en rizomas (que crecen en sentido horizontal), bulbos (que poseen catáfilas, es decir hojas adaptadas para almacenar sustancias nutritivas) y tubérculos (que son gruesos y cortos, y poseen yemas que dan origen a vástagos aéreos de donde nacen hojas y flores). Los tallos subterráneos pueden ser acuáticos.

Hoja

Es el principal órgano sintetizador de alimento de los vegetales; es una excrescencia lateral del tallo y las ramas. Las hojas no modificadas con fines particulares tienen por lo general dos partes principales: un tallo llamado pecíolo y una porción ensanchada y plana llamada limbo. El color verde del limbo de casi todas las hojas se debe a la presencia de clorofila, un pigmento que las plantas utilizan para fabricar los azúcares llamados hidratos de carbono a partir de agua y anhídrido carbónico. No todas las hojas son verdes; muchas contienen otros pigmentos que enmascaran el verde de la clorofila, y algunas carecen de clorofila en todo el limbo o en partes de él. La coloración que las hojas adquieren en otoño se debe casi siempre a la descomposición de la clorofila, que deja al descubierto estos otros pigmentos. La estructura interna de las hojas, como la de raíces y tallos, es una modificación de una pauta básica común a casi todas las plantas vasculares.

Función de las hojas

La hoja cumple diferentes funciones; entre ellas encontramos las siguientes:

– Fotosíntesis: sólo pueden realizar la fotosíntesis las plantas que poseen clorofila y estén en presencia de la luz, a ello se debe los dos nombres de esta función.

Se trata de una síntesis o formación de material orgánico, cumplida por la clorofila que capta energía luminosa y la transforma en energía química, que será empleada para todos los procesos vitales ulteriores. La fotosíntesis consiste en la formación de hidratos de carbono, realizada por la clorofila en presencia del sol, a partir del agua, anhídrido carbónico y sales minerales.

– Respiración: la respiración es la función por la cual los organismos vivientes -lo mismo plantas que animales- toman oxígeno del aire y eliminan anhídrido carbónico. Esta función se realiza en todas las partes vivas de las plantas, tanto en presencia de la luz o en la oscuridad, tenga o no tenga clorofila. Los intercambios gaseosos con el medio se efectúan a través de la epidermis, especialmente por los estomas; siendo particularmente activas en las hojas y flores.

– Transpiración: la transpiración de las plantas consiste en la eliminación de agua en forma de vapor. Se realiza por los estomas y tiene por objeto expulsar el exceso de agua absorbida por las raíces. Como los pelos absorbentes sólo pueden tomar las sales minerales del suelo en solución muy diluidas, la planta absorbe mayor cantidad de agua de la que necesita; y mediante la transpiración y la exudación elimina el exceso de agua.

21 de mayo del 2017
Categoría: Enciclotin
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