En 2016, científicos encontraron que los mamíferos terrestres más altos del mundo estaban divididos en cuatro especies distintas: la jirafa del sur, la jirafa del norte, la jirafa masai y la jirafa reticulada. La jirafa del norte tiene tres subespecies (Kordofan, Nubia y África Occidental) y la jirafa del sur tiene dos (las jirafas angoleñas y sudafricanas). Esta clasificación se basa en el análisis genético de más de mil muestras de ADN tomadas de las principales poblaciones de jirafas de África. Diversos estudios sugieren que sus antepasados probablemente evolucionaron en el centro sur de Europa hace unos 8 millones de años y entraron en África a través de Etiopía hace unos 7 millones de años, prosperando mejor que los parientes que se mudaron a Asia y murieron unos millones de años después.